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Cómo utilizar un escritorio remoto para la transferencia de archivos


Descubre las ventajas de utilizar una conexión de escritorio remoto para transferir archivos

Compartir archivos puede ser desde enviar un correo electrónico con un archivo adjunto, compartir con un amigo una memoria USB con fotos de tus vacaciones o incluso enviar memes en un chat de grupo.

Quizá te preguntes: ¿cuál es la diferencia entre estos ejemplos y la transferencia de archivos mediante una conexión de escritorio remoto? ¿No son todos estos métodos formas de transferencia remota de archivos? Existe una diferencia y te la vamos a explicar.

¿Qué es la transferencia de archivos mediante escritorio remoto?

La transferencia remota de archivos se refiere al intercambio de datos entre dispositivos o servidores a larga distancia, normalmente fuera de la red local.

Un escritorio remoto es una forma de ver remotamente la pantalla de otro dispositivo e interactuar con él, por ejemplo, para propósitos de soporte remoto. También es una buena manera de intercambiar archivos.

La seguridad y la estabilidad de una conexión remota merecen especial atención, especialmente cuando se transfieren archivos de gran tamaño a varios países y con diferentes anchos de banda. En lugar de intercambiar datos a través de hardware como las memorias USB, la transferencia remota de archivos permite transferir desde unos pocos megabytes hasta grandes cantidades de datos.

¿Por qué es importante la transferencia remota de archivos?

A veces, solo es necesario enviar un archivo adjunto por correo electrónico, pero otras, cuando se colabora en proyectos en todo el mundo, los participantes necesitan poder compartir y transferir grandes cantidades de datos de forma segura y rápida. No se puede esperar horas o incluso días para, por ejemplo, obtener los resultados de los análisis necesarios para seguir adelante con un estudio. Compartir archivos a través de un escritorio remoto es una alternativa perfecta en estos casos.

¿Qué hay que tener en cuenta al utilizar la transferencia de archivos mediante escritorio remoto?

Los tres factores más importantes que conforman una buena solución para la transferencia remota de archivos son:

1. Seguridad

La seguridad siempre es la prioridad. Una herramienta para compartir archivos debe estar bien encriptada y ser de confianza, para que ningún tercero pueda acceder a los datos transferidos. Una sesión de escritorio remoto puede ser utilizada para una conexión directa y perfectamente encriptada entre dos ordenadores.

2. Velocidad

Dependiendo del tamaño del archivo, la carga de datos puede tardar horas. A continuación, el compañero con el que colaboras de forma remota tiene que descargarlos, lo que podría quitarte aún más horas del día. Para no consumir recursos importantes, los archivos grandes deben intercambiarse de la forma más directa y rápida posible: simplemente copiando y pegando los datos de un ordenador a otro.

3.  Compatibilidad entre plataformas

La mayor ventaja de la transferencia de archivos mediante escritorio remoto es que puede (y debe) funcionar en todas las plataformas comunes. Hoy en día, la gente trabaja con una gran variedad de sistemas operativos. AnyDesk tiene incluso una aplicación de navegador, que te permite utilizar un navegador como Firefox o Chrome para la transferencia de archivos de escritorio remoto.

¿Cómo funciona la transferencia de archivos de escritorio remoto?

Supongamos que deseas transferir archivos desde tu escritorio remoto a tu ordenador local. En primer lugar, debes iniciar una sesión. A través de AnyDesk, puedes configurar el acceso desatendido, lo que significa que puede acceder a tu dispositivo remoto con una contraseña. Estas son las opciones para transferir los archivos:

1. Copiar y pegar

Esta es la forma más sencilla de enviar archivos mediante AnyDesk. Los portapapeles de tu dispositivo remoto y tu dispositivo local se sincronizan durante una sesión de escritorio remoto.

Puedes copiar tu archivo en la pantalla remota de tu ordenador de trabajo, abrir una carpeta en tu ordenador local y simplemente pulsar CTRL+V. Y ya está. Pero si tienes una cantidad de archivos más grande y necesitas una forma más estructurada de transferirlos, también tenemos una solución para ti.

2. Utilizar el Gestor de archivos

Disponible para Windows, macOS y Linux, el Gestor de archivos permite organizar la transferencia de archivos de acceso remoto, incluso sin una sesión regular, es decir, si no tienes acceso a la pantalla, solo a los archivos de tu dispositivo remoto. En un árbol de directorios, puedes ver tanto tus archivos locales como tus archivos remotos de un vistazo y puedes cargarlos y descargarlos directamente al dispositivo deseado.

Si tienes que trabajar en equipo de forma remota y necesitas una forma eficaz de compartir archivos, considera la posibilidad de trabajar con un software de escritorio remoto. AnyDesk, por ejemplo, tiene mucho más que ofrecer que la simple transferencia de archivos. Descubre las características de AnyDesk y pruébalo por ti mismo.

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